En junio de 2024 viajamos a Japón, un destino que siempre habíamos soñado. En un parque precioso de Kioto, durante una sesión de fotos vestidos con kimonos tradicionales, Javi me sorprendió con una pedida de mano inolvidable. Rodeados de calma, naturaleza y mucha emoción, dije que sí.
Desde entonces, Japón no es solo un recuerdo bonito, sino el lugar donde comenzó nuestra nueva aventura.